Qué ver en Cabezón de Liébana
Localización
El Cartulario de Santa María de Piasca se encuentra localizado actualmente en la Biblioteca Municipal de Santander.
Historia
El cartulario es un libro confeccionado por un organismo o un particular en el que se copian privilegios, derechos, títulos de propiedad, concesiones y, en general, cualquier documento de su archivo.
El cartulario fue realizado por el Monasterio de Santa María de Piasca, término municipal de Cabezón de Liébana. El libro data del siglo XII, llevando un registro de eventos hasta más o menos el siglo XVIII. Este está realizado bajo el estilo romántico.
La encuadernación del cartulario está hecha de pergamino oscurecido, cuenta con un tamaño desigual de aproximadamente 205 x 400 mm. En su interior alberga copias de escrituras completas y fragmentos escritos desde el año 948 y hasta el año 1289. Estas más o menos 65 escrituras están realizadas en 35 hojas de pergamino y 82 hojas de papel. Hemos de resaltar que las hojas en pergaminos tienen numeración arábiga del siglo XVIII.
El Cartulario de Santa María de Piasca fue declarado Bien de Interés Cultural el 08 de agosto del 2003.
Servicios
Se puede ver el ejemplar en la Biblioteca Municipal de Santander pues está abierto al público.
Localización
El Santuario de la Virgen de la Luz se encuentra situado en Peña Sagra en una ladera a 1500 metros de altura en la localidad de Aniezo en el municipio de Cabezón de Liébana.
Historia
El Santuario de la Virgen de la Luz fue edificado gracias a las limosnas de los devotos de la zona. Es así como se levanta una Ermita en el mismo lugar de la aparición de la Virgen de la Luz.
La historia nos cuenta que al deteriorarse la ermita con el tiempo se decide hacer una en un terreno más bajo, en Las Cagigas, a modo de que más personas pudieran acercarse a venerar a la Virgen, sin embargo esta obra no pudo realizarse debido a que los materiales que se dejaban en la nueva locación de la ermita aparecían al día siguiente en el Santuario original. Se tomo este hecho como el deseo de la Virgen de que el lugar de culto fuera el mismo de siempre y fue allí donde reconstruyeron el Santuario de la Virgen de la Luz que conocemos hasta nuestros días.
La Ermita aloja la imagen de la Virgen de la Luz; esta tallada en piedra de alabastro. La imagen mide veintitrés centímetros de alto y la peana veintisiete, al ser tan pequeña la imagen ha sido llamada La Santuca.
La imagen de Nuestra Señora de La Luz fue nombrada patrona de Liebana por y Juan XXIII en 1960 y coronada por el señor obispo de Santander, don Juan Antonio del Val, el día 2 de mayo de 1991
La procesión con La Santuca se viene celebrando el dos de mayo incluso desde antes del siglo XV.
En el año 1920 el sacerdote, don Carlos Fernández escribió el libro: “Nuestra Señora de la Luz de Liebana, venerada en las montañas de Peña Sagra: Historia, Novena y Auto.”
Este libro mucha aceptación entre los fieles y del que hace unos años fue re editado.
La leyenda de la aparición de la Virgen de la Luz nos cuenta que mientras una pastora de Aniezo cuidaba sus ganados en la falda de Peñasagra escuchó un ruido extraordinario suave y agradable y enseguida una música dulce como la de los Ángeles; en cuanto miró hacia la dirección de donde venían aquellos sonidos logro ver entre el follaje de hayas a una Señora Celestial que sostenía en su brazo derecho a un niño hermoso, la pastora se acerco a la señora para enseguida darse cuenta que se trataba de la Santísima Virgen. La virgen le dijo lo siguiente: “El Señor te acompañe y no temas, hija mía. Llégate al inmediato pueblo de Aniezo y refiere al Rector de aquella iglesia cuanto de ver acabas, declarándole de mi parte, que cavando la tierra, se hallará una imagen mía aquí en este sitio, donde es voluntad de Dios que sea venerada”
La pastora bajo corriendo a contarle al sacerdote lo acontecido mas este no le cree, vuelve a subir la pastora al monte y la Virgen le vuelve a hacer el mismo encargo a lo que la pastora le contesta que nadie le va a creer lo acontecido como paso la primera vez y fue entonces cuando la Virgen le graba con sus dedos una Cruz en la frente.
Al bajar la pastora nuevamente con el sacerdote y este al ver la divina señal en la frente de la pastora cree en su relato y al día siguiente acompañado de algunos vecinos suben hasta Peñasagra y donde la pastora dijo ver a la Virgen se levanta una Ermita que hasta hoy en día sigue en pie para veneración de los fieles.
La Virgen de La Luz tiene su festividad en dos de mayo.
Servicios
El Santuario de la Virgen de la Luz se encuentra abierto al culto.
Localización
El castro de Los Cantones se encuentra ubicado en la localidad de Cahecho, Peñasagra, en el municipio de Cabezón de Liébana.
Historia
Esta fortificación de tipo castrense se encuentra sobre una loma en medio de un robledal.
El yacimiento arqueológico de los Cantones se divide en dos recintos. El ambiente externo se identifica con facilidad debido a una estructura circular a modo de bastión. Más allá encontramos un amplio espacio llano delimitado por un terraplén de 250 metros con dirección al sur hasta adosarse al recinto mayor.
Es en esta área donde se encuentra uno de los accesos principales al recinto, lamentablemente debido a la vegetación no se han podido identificar otras entradas o la delimitación exacta del recinto.
El ambiente interno cuenta con mayor complejidad en sus estructuras. Este está formado con una serie de terraplenes dispuestos en forma concéntrica, ideal para el establecimiento de viviendas. El terraplén exterior cuenta con una forma semi rectangular de ángulos redondeados y cuyo eje principal llega a alcanzar los 250 metros. En el centro encontramos una puerta de acceso, esta es estrecha y oblicua que nos lleva a un espacio que podría tratarse de un torreón o punto de control que se encuentra antes del recinto al que nos lleva esta entrada. Dentro de este con encontramos con un pedrero que se piensa era para facilitar la edificación, estas piedras llegan a superar el metro de altura.
El área total de este castro es de aproximadamente 9 hectáreas por lo que es uno de los castros mas grandes hallados en Liebana y de la región. Se cree que este pudo jugar un papel importante en la época protohistórica y un enclave vital para el control de entrada del valle desde el Norte.
El yacimiento al carecer de un estudio propiamente dicho y al estar rodeado del robledal se hace difícil situarlo en una fecha o época exacta. Tampoco se puede decir si jugo algún papel durante la época de la romanización de Cantabria.
Debido a que no hay una protección debida la conservación de este castro se ve afectada día a día.