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Ermita de San Antonio en Caviedes

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Localización

La Ermita de San Antonio se encuentra localizada en el pueblo de Caviedes del municipio cántabro de Valdáliga.

Historia

La Ermita de San Antonio fue construida a mediados del siglo XVIII en el Monte Corona.

Fue en 1629 cuando se tramitaron las licencias para la consagración de la ermita bajo la advocación de San Antonio.

La construcción se realizó a costa del licenciado don Juan González de la Madrid, probablemente sobre las ruinas de una edificación anterior.

Aunque algunos historiadores identifican aquellos restos como románicos, para otros ven evidencias de un poblado primitivo, hipótesis apoyada por la presencia de los de otros poblamientos antiguos en el Monte Corona, como los encontrados en el entorno de la ermita de San Esteban o de la Santa Cruz.

La historia del Santuario ha conocido dos restauraciones, una en 1798 y otra en 1914, realizada gracias a una donación destinada a la reforma de la actualmente derruida ermita de Santa Cruz.

La imagen del Santo, así como un Cristo crucificado, originales de la capilla, se encuentran hoy día custodiados en la iglesia parroquial de Caviedes.

San Antonio celebra su fecha principal de adoración los 13 de junio de cada año donde el Santo sale en procesión desde la campa para luego celebrar una romería.

Ermita_de_San_Antonio

Este templo tiene planta en forma de cruz latina, de una sola nave con tejados de varias alturas, crucero cubierto con cúpula. Cuenta con un ábside de forma poligonal y el atrio ubicado hacia los pies del templo que yace sobre columnas con capiteles de orden toscano que posee una cubierta a tres aguas

La puerta de la ermita cuenta con un arco de medio punto con un frontón triangular.

La nave en su interior presenta una cubierta de bóveda de crucería con claves polares pinjantes, la cubierta del crucero por otro lado es una bóveda semicircular sustentada sobre pechinas en las que se muestran números clásicos del estilo gótico y clasicista.

En el altar podemos apreciar un retablo muy colorido de estilo clásico en las que se encuentran figuras de San Antonio, El Corazón de Jesús y la Virgen del Carmen.

Entorno

El entorno de la ermita de San Antonio se configura como uno de los lugares más frondosos del Monte Corona.

Los prados del área recreativa aparecen los lados de árboles de gran tamaño, como pinos cipreses o planos, en sintonía con la gran masa forestal en la que destacan las viejas impresionantes cagigas.

Sus troncos revelan la actividad biológica de los numerosos huéspedes que albergan, y llama a la atención la profusión de galerías practicadas por los longicornios.

El camino que conduce hasta el puente de Bichurichas y Ríoturbio, es un recomendable paseo por una de las mejores manchas del bosque autóctono de todo el Monte Corona, en la que se pueden encontrar además de las cagigas, hayas, abedules, arces, alisos o acebos.

Las especies exóticas también tienen cabida, y los alerces, secuoyas, pinos, robles americanos y eucaliptos comparten el espacio con las especies autóctonas.

Servicios

La Ermita de San Antonio está abierta al culto.




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